La renta agraria mantiene su tendencia al alza y, por tercer año consecutivo, ha batido un nuevo récord, al situarse en 29.955,3 millones de euros en 2018, con un aumento del 3,4% con respecto al año anterior, según las primeras estimaciones del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.
La renta agraria por Unidad de Trabajo Anual (UTA) ha aumentado en un 4,7%, hasta alcanzar los 34.787,6 euros, debido al incremento del 3,4% en la renta agraria, combinada con una disminución del 1,2% en volumen de trabajo en la agricultura en UTA.
La evolución positiva de la renta agraria viene de la mano de un nuevo récord histórico de la producción de la rama agraria, con 53.086 millones de euros, sostenido por el buen comportamiento de la producción vegetal y animal, incrementos que han sido contrarrestados en parte por un aumento de los consumos intermedios.
La producción vegetal aumenta un 6,5%, hasta los 32.031,3 millones de euros, incremento propiciado por el buen año hidrológico registrado y que ha dado lugar fuertes incrementos en producción en cereales (43,3%), plantas forrajeras (25,3%) y vino y mosto (18,1%), cultivos que sufrieron de una aguda sequía en la campaña anterior.
El efecto del buen año hidrológico ha sido ligeramente contrarrestado por un descenso global del 0,3% de los precios en el conjunto de la producción vegetal, entre los que destacan los registrados en aceite de oliva (-24,1%) y vino (-5,0%), productos que vienen de máximos históricos en la campaña anterior.
Por su parte, la producción animal ha experimentado una subida de un 2,6% respecto a 2017 debido al buen comportamiento de las producciones, que aumentaron un 4,5%, destacando el porcino (6,4%), aves (5,2%) y huevos (6,9%). Estos incrementos se han visto contrarrestados por el descenso en un 1,8% de los precios en el conjunto de la producción animal, destacando el descenso registrado en porcino (-6,2%).
Los consumos intermedios aumentan un 6,2%, debido a un incremento en un 2,9% en las cantidades consumidas, acompañado por un incremento del 3,2% en precios. Destacan los aumentos registrados en energía (13,5%), debido fundamentalmente a un incremento de los precios de un 13,6%, seguida de fertilizantes 8,4% y piensos 6,9%, incrementos debidos principalmente a un aumento en el volumen utilizado (+6,8% y +4,6% respectivamente).
Las subvenciones totales, por su parte, se mantuvieron prácticamente constantes con respecto a 2017.