La junta directiva de ASAJA, reunida en Madrid, reclama a la Unión Europea concienciación y soluciones ante el grave problema de falta de agua que afecta, de forma grave a nuestro país, pero también a países del arco mediterráneo como Francia, Italia y Grecia, e incluso a parte de Alemania o Países Bajos. Es el momento de adoptar medidas para preservar y mejorar los recursos hídricos de la UE e invertir fondos europeos en infraestructura que optimicen la acumulación de agua y aprovechen las escasas reservas. Instamos a la ministra Ribera, que preside este Consejo Informal, a que actúe con responsabilidad y lidere esta iniciativa.
Según los datos del Observatorio Europeo de la Sequía, en más de la cuarta parte del territorio de la UE se dan condiciones de alerta por sequía, mientras que el ocho por ciento se encuentra ya en estado de alerta. La falta de lluvias y las altas temperaturas en el sur de Europa nos abocan a un cambio urgente en las políticas sobre gestión hídrica y mejora de los recursos, afectados estos últimos por varios años de sequía en la UE y condicionados en el futuro cercano por los efectos del cambio climático.
Es necesario por tanto, actuar de forma valiente y decidida, con una política común de anticipación, en vez de tener que habilitar, año tras año, ayudas destinadas a paliar los efectos de la sequía en las producciones. Precisamente hoy, está previsto que la UE dé luz verde a la asignación de 330 millones de euros de la reserva agrícola de 2023 destinados a ayudar a los agricultores de 22 países cuyas producciones se han visto afectadas por condiciones meteorológicas adversas y por las consecuencias de la guerra de Ucrania. España recibirá 81 millones de euros para afrontar los daños provocados por la sequía.
ASAJA pide que se deje de señalar a la agricultura como la gran consumidora de Agua y como la culpable de cambio climático y se tome conciencia de un problema que cada vez afecta a más países comunitarios y por tanto se inviertan fondos comunitarios en infraestructuras hidráulicas de acumulación de agua (embalses, recarga de acuíferos..) y en regadíos que crean riqueza, fijan población y garantizan alimentos sanos, seguros y asequibles para la población.
Por otra parte, ASAJA insta a los responsables de Medio Ambiente de la UE a que a que escuchen a los agricultores en su firme rechazo de la Ley de Transformación de la Naturaleza y actúen en consecuencia ya que la propuesta, en sus términos actuales, va en contra de todo el sector primario y del mundo rural y por tanto es necesaria una nueva redacción que respete los intereses de todos.