La despoblación es uno de los procesos más graves y preocupantes que afectan hoy a la sociedad española. Con el objetivo de denunciar esta situación mediante un arte tan democrático, accesible y con tanta capacidad de despertar conciencias como la fotografía, el certamen FotoRural ha centrado este año su temática en el despoblamiento que sufre la España vaciada.
El jurado ha hecho público hoy su fallo, que ha elegido a las tres imágenes ganadoras en la categoría general, así como los premios ENESA a la fotografía de los seguros agrarios, y el premio FADEMUR a la fotografía de las mujeres rurales. También se han seleccionado veinte imágenes finalistas.
El comité organizador, formado por UPA, Eumedia y la Fundación de Estudios Rurales, ha destacado la doble vertiente de las imágenes participantes: por un lado, la melancolía que causa un pasado que ya no existe, y por otro, la esperanza evocada por escenas de vida y de trabajo en las que son protagonistas las personas que aún pueblan la España despoblada.
La España vaciada aún está viva
El jurado, en el que también han participado los patrocinadores del concurso, el Foro Interalimentario y la Entidad Estatal de Seguros Agrarios, dependiente del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, ha destacado la fuerza de los paisajes, la relación intrínseca del ser humano con los animales con los que vive y convive en el medio rural o el nexo generacional que se establece entre personas mayores y los niños que protagonizan muchas de las imágenes ganadoras y finalistas.