La subsecretaria del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, María Dolores Ocaña, ha presidido hoy la comisión general de la Entidad Estatal de Seguros Agrarios (ENESA), entidad de la que es presidenta, y en la que se ha sido analizado el estado actual de la siniestralidad agraria.
Especialmente se han evaluado los daños provocados por la sequía en cereales y pastos. La irregularidad de las precipitaciones, así como la falta de lluvias en determinadas zonas cerealistas, ha generado daños importantes en Castilla y León, Castilla-La Mancha, Extremadura, Navarra y Aragón.
Los asegurados percibirán indemnizaciones por valor de más de 100 millones de euros debido a los daños por sequía en los cereales de invierno, según las estimaciones. La superficie total siniestrada en el caso de estos herbáceos rondará las 950.000 hectáreas esta campaña, casi la mitad de la superficie asegurada por el riesgo de sequía. Hasta la fecha se han peritado pérdidas en cereales en más de 640.000 hectáreas.
Los pastos también se están viendo afectados por la falta de lluvias. En relación al seguro que compensa la pérdida de pastos, en la actualidad se prevé una indemnización superior a los 13 millones de euros.
Para hacer frente a este tipo de situaciones, la subsecretaria ha hecho hincapié en que el sistema de seguros agrarios es “una herramienta fundamental” a disposición de agricultores y ganaderos que garantiza las indemnizaciones. Además, en caso de producirse una elevada siniestralidad es asumida por el Consorcio de Compensación de Seguros que actúa como reasegurador público del sistema.