El Pleno del Parlamento Europeo ha aprobado hoy la nueva estrategia de la UE en favor de los bosques para 2030, cuyo objetivo es adaptar los bosques de Europa a las nuevas condiciones y fenómenos meteorológicos extremos que genera el cambio climático. La eurodiputada Clara Aguilera, portavoz socialista de la Comisión de Agricultura en la Eurocámara, ha acogido con satisfacción esta decisión: “Es un instrumento estratégico muy importante para alcanzar nuestros compromisos relacionados con la mitigación y adaptación al cambio climático, la conservación y restauración de la biodiversidad, la promoción de la bioeconomía circular y el apoyo al desarrollo rural”.
Los bosques y el sector forestal son una parte esencial de la transición europea hacia una economía moderna, climáticamente neutra, competitiva y eficiente en el uso de los recursos. La estrategia establece una visión y acciones concretas para mejorar la cantidad y calidad de los bosques de la UE, así como para fortalecer su protección, restauración y resiliencia. Aguilera ha insistido en que es necesario actuar para garantizar que estos objetivos se alcancen realmente, que “solo se lograrán si se integran los aspectos económicos y sociales”.
El texto apuesta por el desarrollo de unos bosques sanos, diversos y resilientes, "que contribuyan a nuestras ambiciones en materia de clima y biodiversidad, a la creación de empleo y oportunidades de futuro en las zonas rurales y a la promoción de una bioeconomía forestal sostenible", ha afirmado la eurodiputada. Aguilera ha mostrado su apoyo al desarrollo de una bioeconomia circular, “fundamental en la transición ecológica y para el desarrollo de las zonas rurales”. Además, ha ensalzado la bioenergía de origen forestal, “un producto fundamental para el sector forestal”. “Se debe promover su uso sostenible y cercano al lugar donde se produce”, ha añadido.
La europarlamentaria ha puesto en valor el papel de la silvicultura sostenible “para favorecer la protección de la biodiversidad, la resilencia y la mitigación del cambio climático, sin excluir las especies autóctonas dada por la diversidad”. En este sentido, la estrategia reconoce el papel central de los bosques, los silvicultores y toda la cadena de valor forestal para cumplir con los objetivos del Pacto Verde Europeo.
Asimismo, Aguilera ha elogiado la relevancia dada a la multifuncionalidad de los bosques incluida en esta estrategia. Sin embargo, ha lamentado que no se mencionen “cuestiones medioambientales de gran relevancia para Europa, como la desertificación o el abandono de tierras forestales, además de temas como los incendios forestales o las plagas, que deberían haber tenido más atención y concreción”.