Las organizaciones pesqueras de las cinco comunidades autónomas del Mediterráneo, incluyendo cofradías, cooperativas y asociaciones, han manifestado al Gobierno la imposibilidad de asumir un nuevo recorte de su esfuerzo pesquero medido en días y, más aún, sin siquiera conocer el resultado de la aplicación de los realizados en los años anteriores sobre los distintos stocks que contempla el Reglamento europeo.
Los pescadores, en una carta dirigida a Alicia Villauriz, secretaria general de Pesca del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), tras conocer la propuesta de la Comisión Europea (CE) a debatir en el Consejo de ministros de Pesca de la UE, que se celebra los próximos 11 y 12 diciembre, manifiestan que, en los tres años de aplicación del Plan Plurianual, este recorte ya ha superado el 30%.
Igualmente, apuntan que en una pesquería multiespecífica como la mediterránea es inviable alcanzar al unísono el Rendimiento Máximo Sostenible (RMS) en todas las especies que contempla el Reglamento y sin haber evaluado siquiera el impacto de las medidas ya adoptadas en el marco del plan plurianual. Cabe recordar que el Plan Plurianual de Pesca en el Mediterráneo Occidental fue adoptado en 2019 y entró en vigor en enero de 2020.
En su escrito, el sector pesquero del Mediterráneo manifiesta la necesidad de aplicar a este plan el mecanismo establecido en otros planes con un tipo de gestión basado en cuotas, permitiendo la posibilidad de trasladar los días que un Estado miembro no utilice durante un año al ejercicio siguiente o, en su defecto, un porcentaje de éstos.
Respecto al mecanismo previsto en el artículo 8 de la propuesta de la CE por el que se incrementaría en un 3% el número de días de pesca si se usan unas mallas más selectivas o se establece un cierre de al menos cuatro semanas consecutivas en áreas de desove o se incremente la talla mínima de la merluza a 26 centímetros, el sector cree que puede ser positivo para los recursos y la flota, pero insiste en que esos días deben de ser “extras”, independientes de los totales otorgados al Estado miembro. En este sentido, la flota considera como “raquítica” la propuesta de incremento de un 3%. Así mismo, el sector manifiesta en su escrito que su definición debe tener en cuenta medidas de selectividad asumibles, en un plazo temporal adecuado y con avales científicos, y que no todas las medidas pueden ser consideradas de forma general para todas las flotas y todos los caladeros, por lo que es necesaria la identificación por segmentos de pesquerías y zonas de pesca.
Cabe recordar que el sector está desarrollando distintos proyectos dentro de la actividad de pesca directa, tales como el uso de puertas voladoras hidráulicas para minimizar el impacto del arrastre en el fondo marino o la utilización de nuevos tipos de mallas experimentales más selectivas con las especies. A ellos se suman diversos proyectos de I+D+i de conservación marina.
Respecto a la gamba roja, para la que la propuesta de la CE propone una disminución del 7% del límite de capturas establecido para 2022, el sector manifiesta que todos los informes científicos consultados indican que el stock, salvo en zonas muy específicas, está explotado bajo criterios de sostenibilidad (RMS). Por ello, los pescadores consideran oportuno, o bien eliminar la propuesta de disminución o, en su defecto, mantenerla en el mismo nivel que en 2022.
Por último, en su escrito a Villauriz, el sector apunta la imposibilidad manifiesta de alcanzar el RMS en 2025 para todas las zonas de pesca y especies, y reitera la necesidad de aplazar este objetivo a 2030.
Cabe recordar que el Plan Plurianual de Pesca en el Mediterráneo Occidental ya ha supuesto un gran esfuerzo para el sector, incluida la reducción de más del 30% de los días de pesca, además de paralizaciones temporales de la flota de arrastre de dos meses de duración y vedas espacio temporales para la protección de juveniles.
España defiende las mejores posibilidades
El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, ha expuesto a las comunidades autónomas que la consecución de las mejores posibilidades de pesca que permitan mantener la viabilidad de la flota es el principal objetivo con el que España afronta el Consejo de Ministros de la Unión Europea (UE) de los próximos días 11 y 12, en el que se decidirán los Totales de Captura Admisible (TAC) y cuotas pesqueras para el año 2023. El ministro ha anunciado que presentará medidas alternativas para evitar una nueva reducción de los días de pesca en el Mediterráneo y la revisión de algunas de las propuestas para el Atlántico.
En la reunión del Consejo Consultivo de Política Agrícola y Política Pesquera para Asuntos Comunitarios, que ha presidido hoy por videoconferencia, Luis Planas ha considerado que debe limitarse al máximo la nueva reducción de los días de pesca propuestos un año más por la Comisión Europea, de un 9,8 % sobre 2022, y ha abogado por elevar el porcentaje previsto en el mecanismo de compensación para recuperar una parte -hasta un 3 %- si de dan determinadas condiciones.
El ministro ha considerado que las últimas evaluaciones científicas de las disponibilidades de especies incluidas en el plan plurianual de gestión del Mediterráneo permiten atibar ciertas mejoras, y que el nuevo recorte de los días de pesca supondrá un importante impacto socioeconómico sobre la flota. La reducción en los días de pesca sin una compensación suficiente por la adopción de medidas de selectividad como vía más eficaz para la mejora de los stocks, motivó que el año pasado España votara en contra de la propuesta de la Comisión Europea sobre TAC y cuotas en el Mediterráneo. España reiterará la defensa de la eficacia del empleo de redes más selectivas u otras medidas con las que podría alcanzarse el rendimiento máximo sostenible para algunos stocks, como reconoce el propio Comité Científico, Técnico y Económico de la Pesca de la UE.
En cuanto al Atlántico, España, además de las negociaciones que involucran a Reino Unido, Noruega y los estados costeros que no han concluido por el momento, tiene intereses en 18 de las 26 poblaciones que serán objeto de negociación en el Consejo de Ministros de Agricultura y Pesca. La Comisión propone propone mantenimientos o incrementos de los TAC y cuotas para 2023 en especies de gran interés para el conjunto de la flota, de acuerdo a las recomendaciones del Consejo Internacional para la Exploración del Mar (ICES, por su denominación en inglés).
Sin embargo, España presentará propuestas técnicas para lograr mayor incremento de cuotas de abadejo, lenguado y cigala. Es destacable el caso de la merluza sur, que después de 8 años sucesivos de recortes, este año se permitirá un incremento considerable debido a la importante recuperación de la especie constatada por el ICES. Por el contrario, la Comisión propone para el jurel oeste un TAC 0 por la mala situación de la especie y España apoya el mandato general del plan de reconstrucción elaborado por el Consejo Consultivo de Especies Pelágicas que permite una captura total de 15.513 toneladas y solo para pesca accesoria.