“Las reformas tienen que servir para mejorar las cosas”. Es el mensaje que ha transmitido hoy el secretario general de UPA, Lorenzo Ramos, al ministro de Agricultura, Luis Planas, en la reunión del Comité Asesor Agrario en Madrid. Un mensaje que apela a las ansias de cambio de una política que en las últimas décadas no ha logrado algunos de sus principales objetivos.
La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos ha participado en un nuevo encuentro con el equipo del ministerio de Agricultura, con su titular a la cabeza, y con el resto de las organizaciones representativas del sector. El principal asunto abordado ha sido la reforma de la Política Agraria Común, que afronta su tramo final con la redacción del Plan Estratégico Nacional, que España debe presentar antes de fin de año.
UPA ha propuesto que el Plan Estratégico tenga un espíritu reformista, y sirva para corregir defectos y plantear soluciones a los problemas del campo español. Sobre la figura del agricultor activo, el secretario general de UPA, Lorenzo Ramos, ha asegurado que se debe tener en cuenta la actividad, la dedicación y el origen de los ingresos y no el nivel de ayudas percibidas: “Hay agricultores que no cobran ayudas de la PAC y son profesionales como la copa de un pino”, ha sentenciado.
“A nosotros nos preocupan más los 2.000 perceptores que se llevan el 10,5% del presupuesto que los más de 400.000 que cobran menos de 5.000 euros”, ha declarado Ramos en rueda de prensa al término de la reunión. “De esos 400.000, apenas una mínima parte no reúnen el requisito de que el 25% de sus ingresos provengan de la actividad agraria”, ha asegurado.
“Las ayudas de la PAC tienen que ser para la agricultura familiar y profesional, porque históricamente no ha sido así”, ha remarcado Ramos. “Ahora tenemos una oportunidad para beneficiar a los que más lo necesitan”.