La Comisión Europea devolverá 56,64 millones de euros a los agricultores españoles --dentro del total de 444 millones al conjunto de agricultores europeos--, una cantidad que se dedujo originalmente del presupuesto de 2018 para crear la llamada reserva de crisis agrícola de este año.
A pesar de que el sector agrícola enfrentó situaciones críticas este año, como el clima extremo durante el verano, no fue necesario utilizar la reserva de crisis en 2018, según informa la Comisión en un comunicado, en el que detalla que las medidas de apoyo adoptadas para hacer frente a la difícil situación del mercado para determinados sectores se financiaron con el presupuesto disponible de la PAC.
"Los daños causados por las condiciones climáticas adversas durante esta primavera y verano han sido abordados por otras medidas disponibles para ayudar a los agricultores a superar las consecuencias. Esto incluye excepciones a ciertas condiciones relacionadas con pagos ecológicos y pagos avanzados más altos para 2019", explica la CE.
La decisión implica que los Estados miembros pueden reembolsar a los agricultores los montos deducidos de los pagos directos de este año a partir del 1 de diciembre de 2018.
El concepto de la reserva de crisis agrícola y su mecanismo de reembolso se acordó en la reforma de la PAC de 2013 y se aplicó por primera vez en el ejercicio presupuestario 2014.