¿Cuál es el papel de GEA dentro del sector del olivar y del aceite de oliva?
GEA ha ocupado una parte muy importante en el sector del olivar y del aceite de oliva desde hace décadas. Desde principios del siglo XX hemos participado en la producción de aceite de oliva y hemos sido testigos y protagonistas de la modernización e integración de la última tecnología en este sector. También hemos trabajado en potenciar la importancia de la sostenibilidad en el sector. Y, además, desarrollamos importantes labores divulgativas y formativas para los profesionales de aceite de oliva a través de eventos, cursos y diferentes colaboraciones. En este sentido, somos una empresa con un valor social para el sector importante.
¿Cuál es su apuesta en el sector del olivar y el aceite de oliva para los próximos años, tanto en el mercado español como en los mercados internacionales?
GEA siempre ha apostado cien por cien por el olivar y lo seguiremos haciendo. Creemos que la clave es que las almazaras y cooperativas alcancen cotas óptimas de eficiencia y competitividad y para ello es necesario la optimización de recursos, como el menor consumo de agua y de energía eléctrica, o la reutilización de subproductos. Por esta razón, nuestras principales apuestas radican en que nuestros clientes logren la mayor calidad y rentabilidad, la sostenibilidad y el aprovechamiento de dichos subproductos.
En la actualidad, existe una gran competencia en el mercado de la maquinaria para almazaras. ¿Qué destacaría de la tecnología de GEA?
Nuestra pasión por la ingeniería y la investigación han hecho que GEA se haya caracterizado siempre por contar con la última tecnología, con la más alta fiabilidad. Además, nuestro amplio know how en una gran variedad de industrias nos dota de ventajas competitivas de cara a poder aplicar innovadoras soluciones o mejores prácticas que encontramos en ellas. GEA es una empresa consolidada, con un gran espectro global, pero también local. Nuestra maquinaria tiene detrás el alcance global que sólo una empresa de la magnitud de GEA puede aportar, mientras que nuestro equipo humano tiene la cercanía y la confianza de una compañía local.
¿Cómo ayuda el Centro de Excelencia en Aceite de Oliva de GEA a los profesionales del sector? ¿Cómo ha llegado el Centro a mimetizarse del modo en que lo está en el sector nacional e internacional?
GEA siempre ha estado volcada con el sector del olivar y nos involucramos desde diferentes perspectivas, como la formación, la asistencia y el apoyo a ferias sectoriales y, por supuesto, el acompañamiento a nuestros clientes en el desarrollo completo de su solución. Desde el punto de vista de la formación, organizamos los Encuentros de Maestros y Responsables de Almazara, que en 2023 celebró su decimoséptima edición, y que se trata de uno de los eventos formativos de mayor entidad y con más tradición del sector oleícola en España. También organizamos junto a la Universidad de Jaén y la Asociación de Maestros de Almazara (AEMODA) el Curso de Formación en Proceso de Elaboración de Aceite de Oliva Virgen.
En cuanto a las ferias, asistimos y apoyamos eventos tan importantes como Expoliva, de la cual somos patrocinadores, o Agroexpo. Además, GEA siempre está junto a sus clientes, tanto nacionales como internacionales, para apoyarles y ayudarles en todo el ciclo de vida del proyecto, desde el diseño del mismo hasta la puerta en marcha y el servicio post-venta.
La asistencia técnica GEA Service ofrece programas de mantenimiento preventivo diseñados para preparar las almazaras y las líneas de extracción para la siguiente campaña ayudando a comenzar lo antes posible y en las mejores condiciones, a la vez que se alarga el rendimiento y la vida útil de los equipos. Más de 40 técnicos especializados en Aceite de Oliva, con muchos años de experiencia al servicio de nuestros clientes, están listos para desplazarse a cualquier punto de la península ibérica. Un equipo humano experto en las necesidades de las almazaras.
¿Qué retos tiene por delante el sector del aceite de oliva en un futuro a corto y medio plazo?
El principal reto a corto plazo para el sector de aceite de oliva es superar las dos complicadas campañas que llevamos de baja producción como consecuencia de la meteorología. En esta línea, el sector debe hacer frente al cambio climático optimizando los recursos que se tienen, por ejemplo, dando un uso más eficiente al agua para el riego de la que se dispone, buscando variedades de olivar que sean más resistentes a la sequía, a través de los subproductos o utilizando herramientas digitales que ayuden en la gestión más óptima de la almazara.
A nivel de comercialización, debe mantener unos precios estables que permitan fidelizar a los consumidores de este producto, caracterizado por sus condiciones saludables.
En lo que a GEA le concierne directamente, la maquinaria, el sector debe seguir evolucionando en la incorporación de nuevas tecnologías y en la apuesta por la sostenibilidad. Como he indicado anteriormente, trabajamos porque las almazaras y cooperativas alcancen cotas óptimas de eficiencia y competitividad.