Ricardo Migueláñez. Ingeniero Agrónomo. @rmiguelanez
La información oficial sobre la evolución de la producción de leche de vaca en los primeros meses de la campaña 2015/16 se ha limitado a la presentación de las declaraciones obligatorias, aún provisionales, de las entregas de los ganaderos a primeros compradores del mes de abril, el primero de la nueva campaña.
De forma extraoficial y, según algunas organizaciones profesionales, durante este tiempo cunde la impresión y el temor a una deslocalización territorial de la producción de leche en España, desde Galicia y las CC. AA. de la cornisa cantábrica hacia las zonas de producción más próximas a los grandes centros de consumo de Madrid, Cataluña, Valencia o Andalucía, con menos costes logísticos de transporte.
Probablemente, sea aún pronto para que esa impresión se transforme en certeza, aunque cuando el río suena, es que algo lleva dentro y algo hay de cierto. Con la desaparición del régimen de cuotas lácteas han aflorado algunos aspectos sobre la competitividad del sector, que habían permanecido en gran parte agazapados y que no se habían tenido más en cuenta.
Algunos pensaban, por ejemplo en Galicia, que por concentrar en estos últimos años un tercio de la producción lechera de España, se tenían ya ciertos derechos históricos a producir. Y todo eso ahora, cuando ya no existen contingentes de producción en manos de los ganaderos, ha saltado por los aires.
Las empresas transformadoras van a comprar leche no ya solo donde exista volumen y calidad, que también, sino allí donde les resulte más barata su recogida y luego también su transporte hacia los centros de venta al consumidor. Es decir, donde les deje más margen y les dé más rentabilidad, incluso aun pagando un precio más elevado al ganadero.
Las explotaciones ganaderas, más aisladas (zonas desfavorecidas o de montaña), con mayores problemas de comunicación y de logística de transporte, y que, además, sean poco dependientes de la hierba para alimentar a sus animales, tendrán que cuadrar sus cuentas para ver si aún siguen siendo rentables no solo con el precio que les paguen por la leche que produzcan, sino también con los pagos directos, acoplados o no acoplados, que puedan cobrar de la nueva PAC y con otras ayudas procedentes de los programas de Desarrollo Rural, a las que por su condición puedan optar .
Líneas de actuación
Desde el Ministerio de Agricultura se han propuesto varias líneas de actuación, complementarias a la situación que vive el sector ganadero español, que no van a servir por sí mismas para solucionar la fuerte debilidad de los precios de la leche en origen al ganadero, con muchos contrastes según zonas, y que van desde los 0,18-0,20 euros por litro que se pagan a algunas explotaciones gallegas y de la Cornisa, hasta el doble, unos 0,36 euros/litro, en Andalucía, con una media ponderada nacional de 0,31 euros/litro (mes de abril), un nivel por debajo de unos costes de producción, que se sitúan en torno a 0,34-0,36 euros por litro.
Entre las medidas anunciadas están el desarrollo de una campaña divulgativa, orientada en especial a los ganaderos, sobre los contratos obligatorios de suministro de leche, tal y como viene recogido en la normativa del “paquete lácteo”; la elaboración de un modelo que permita fijar los márgenes de los productores y los costes de producción de forma más actualizada, con el fin de que esa información pueda ser empleada también en la elaboración de los índices de referencia de los contratos de compraventa de leche.
También se propone concretar este mismo año el apoyo a las organizaciones de productores de ámbito supra-autonómico, en el marco del Programa Nacional de Desarrollo Rural 2014-2018, así como coordinar con las CC. AA. las ayudas de sus PDRs regionales para mejorar la eficacia de las ayudas de Desarrollo Rural destinadas a planes aplicados en el sector lácteo.
Está previsto igualmente establecer bonificaciones en la suscripción de los seguros agrarios por parte de los ganaderos que estén integrados en OPs.
Por su parte, desde la Dirección General de la Industria Alimentaria del Magrama se plantea diseñar una campaña de promoción del consumo de leche, que se coordinará con las actuaciones que la interprofesional INLAC realice al respecto y, además, continuar con el plan coordinado con las CC. AA. para analizar la leche envasada vendida a PVP especialmente bajos e iniciar también un plan de control de quesos para analizar posibles fraudes en el etiquetado (por ejemplo, la ponderación de tipos de leche en los quesos de mezcla).
Igualmente, se aplicará un nuevo programa de consumo de leche en las escuelas, intentando evitar la dispersión de las ayudas.
AICA e Infolac
Por su parte, la Agencia de Información y Control Alimentario (AICA) detalló al sector aspectos del plan de controles oficiales, en cumplimiento de la Ley 12/2013 de la Cadena Agroalimentaria, habiéndose iniciado 177 inspecciones de oficio en el sector por PVP anormalmente bajos en la leche, trasladándose otras 43 denuncias del sector por “venta a pérdidas” a las Comunidades Autónomas.
En la actualidad existen dos procesos abiertos por denuncias del sector por incumplimiento de la normativa del “paquete lácteo” (RD 125/2015), en los que ya se han llevado a cabo diligencias, estando previsto realizar una primera inspección para recabar información más específica, para la cual existe un plazo de 6 meses, a lo que seguirá otro de seis meses más para elaborar en su caso el informe sancionador.
Aunque desde el sector se valora el trabajo de la AICA, se lamenta que los procedimientos de inspección y sanción sean tan largos, de hasta un año, puesto que benefician al posible infractor, existiendo muchas dudas también sobre las medidas a aplicar cuando en los contratos de suministro se recogen precios especialmente bajos de pago al ganadero.
Por otra parte, con el fin del sistema de cuotas ha desaparecido la obligación que los compradores autorizados tenían de realizar las declaraciones sobre entregas de leche, siendo sustituido por un nuevo sistema de información de las mismas, denominado Infolac.
En esta nueva aplicación informática, cuya puesta en marcha ha tenido algunos problemas de volcado de datos, los primeros compradores tienen que verter la información de la leche que han comprado a los ganaderos, así como los datos sobre el precio medio y la calidad (porcentajes de materia grasa y proteína).
Estos problemas han llevado a un inoportuno retraso en el conocimiento de la información respectiva en un momento en que la gestión de los contratos de suministro está siendo muy difícil, principalmente para los ganaderos y las pequeñas cooperativas no transformadoras, que tienen que enfrentarse con precios a la baja e incluso con la amenaza de no recogida de leche por un supuesto exceso de producción que el mercado no puede absorber y cuya veracidad es imposible de contrastar.
De acuerdo a los datos provisionales del mes de abril pasado, el primer mes de campaña 2015/16, existen 304 primeros compradores que han declarado entregas de más 595,1 millones de kilos de 16.994 ganaderos, que suponen alrededor de un 5% más que en el mes de abril de 2014, con un precio medio ponderado de 0,311 euros/litro, que es un 4% inferior al del mes anterior de marzo y que está casi un 16% por debajo que la media nacional del mes de abril del pasado año. Galicia, con apenas 0,288 euros/litro, es la comunidad con los precios medios más bajos, un 20,2% menos que hace un año, mientras que Andalucía es, con 0,359 euros/litro la comunidad donde están más altos, a pesar de ser también casi un 9% inferiores a los de abril de 2014.