El consejero de Agricultura, Ganadería y Alimentación, Javier Rincón, afirmó que expuso una de las líneas prioritarias de trabajo de la nueva etapa del Departamento va a ser “la disponibilidad y garantía de suministro de agua como uno de los elementos clave en el proceso de producción de alimentos de calidad en la agricultura moderna. Como recurso limitado que es nos obliga a hacer una gestión eficiente”.
De hecho, añadió Rincón, la línea de ayudas a inversiones en infraestructuras de regadíos con objetivos ambientales, es decir, la modernización de regadíos, es una de las que cuenta con mayor dotación presupuestaria de todo el Plan Estratégico de la Política Agraria Común (PEPAC), con casi 58 millones de euros.
Un reto que, según apuntó el consejero, “no es fácil, ya que la creación de regadíos no es precisamente una prioridad de la Comisión Europea siendo la realidad de los países mediterráneos y la de España y Aragón en particular, muy diferente a la de los países del norte y nordeste de Europa”.
Sin embargo, Javier Rincón, insistió en la “intención de seguir aprobando subvenciones para la creación de nuevos regadíos a partir de 2025 manteniendo el sistema de pago diferido en 25 años, con los importes que las disponibilidades presupuestarias nos permitan”.
Apoyo a los seguros
Otro de los ejes centrales sobre los que pivotará el trabajo del Departamento de Agricultura, Ganadería y Alimentación es el impulso del seguro agrario, que Javier Rincón calificó como “la vía más eficaz para dar cobertura al riesgo de los fenómenos climáticos adversos, que cada vez son más recurrentes”.