El Comité Económico y Social Europeo (CESE) ha aprobado, en su sesión plenaria del 23 de mayo, un dictamen de lo que debería ser la PAC después de 2020. Dicho dictamen destaca como punto fundamental, que las ayudas directas únicamente deberán destinarse a los agricultores activos y empresas agrícolas dedicados a la producción agraria, que generen bienes públicos. Por lo que no basta solo con ser el propietario de una explotación agraria. Debe cumplir estos requisitos. Lo que quiere decir que es necesario un sólido Primer Pilar que garantice los ingresos justos a los agricultores activos, así como un incentivo para el suministro de bienes públicos.
Además, en palabras de Jonh Bryan, miembro del comité, “el CESE respalda una PAC fuerte y financiada adecuadamente, así como un aumento del presupuesto de la Unión Europea hasta alcanzar el 1,3% del PIB, en consonancia con el crecimiento de la económica de la UE. Debe otorgarse una financiación adecuada a la PAC para abordar las bajas rentas de los agricultores y trabajadores agrícolas, la inflación y cualquier restricción derivada del Brexit, así como establecer requisitos adicionales en materia de medio ambiente y cambio climático.”
Las disposiciones de la PAC deben atraer y apoyar a los jóvenes agricultores. Para ello hay facilitar medidas como un pago durante 5 años para los jóvenes que se establecen en pequeñas granjas que producen para los mercados locales. Apoyo al relevo generacional mediante un plan de jubilación en el Segundo Pilar y un Plan de Movilidad de la Tierra. También debe ser una PAC que facilite el acceso de las mujeres en la agricultura.
El CESE propone también una revisión del sistema de control en las explotaciones para que sea más simple y menos burocrático a través de tecnologías mejoradas.
La subsidiariedad debe limitarse a la aplicación de los planes de los Estados Miembros para la consecución de los objetivos de la PAC, dándoles flexibilidad para escoger las opciones de pago. Sin embargo, el CESE no está de acuerdo en que los EM transfieran fondos del Segundo Pilar al Primero. Pide un nivel razonable de cofinanciación para todos los EM.
El CESE también ve razonable un etiquetado obligatorio del origen de los productos agrícolas y alimenticios.
Pide también responsabilidad a la hora de importar alimentos que no cumplen las normas de la UE y que sí deben cumplir, obligatoriamente, los EM firmes a la PAC.
Otros puntos clave, son dar mas apoyo a las zonas rurales, y cumplir los objetivos del medio ambiente, cambio climático y biodiversidad.